La empresa tecnológica de Singapur Trident Digital Tech Holdings, que cotiza en NASDAQ bajo el ticker TDTH, ha desatado una tormenta en el mercado cripto al anunciar una ambiciosa estrategia para crear una reserva corporativa de XRP de hasta $500 millones. La iniciativa, revelada el 12 de junio de 2025, busca emular el modelo de acumulación de activos digitales popularizado por Michael Saylor con Bitcoin, pero esta vez apostando por la criptomoneda de Ripple. Sin embargo, el entusiasmo inicial se vio empañado por una caída del 37,6% en las acciones de Trident el día del anuncio, reflejando la incertidumbre de los inversores sobre esta jugada arriesgada.

Trident planea financiar esta reserva a través de una combinación de emisión de acciones, colocaciones estratégicas y instrumentos de financiación estructurada, y ya está en conversaciones con fundaciones cripto y socios institucionales para garantizar condiciones favorables. A diferencia de una simple estrategia de compra y retención, la empresa pretende generar rendimientos mediante la participación activa en el ecosistema de Ripple, incluyendo lo que describe como “mecanismos de staking”. Este punto ha generado controversia, ya que XRP no utiliza un sistema de prueba de participación (PoS), lo que sugiere que Trident podría estar refiriéndose a otras formas de generar ingresos, como préstamos o integraciones en productos financieros de Ripple.

El XRP adquirido se mantendrá como una reserva estratégica a largo plazo, con el inicio de las compras programado para el segundo semestre de 2025, siempre que se cumplan las condiciones regulatorias y de mercado. Soon Huat Lim, fundador y CEO de Trident, destacó que “esta iniciativa refleja nuestra creencia en el potencial transformador de la tecnología blockchain para la asignación de capital y la transferencia de valor transfronteriza”. La empresa también planea una “profunda integración” en el ecosistema Ripple, lo que podría incluir colaboraciones con RippleNet o el uso de la stablecoin RLUSD.

El anuncio de Trident no es un caso aislado. Empresas como Webus International ($300 millones) y VivoPower ($121 millones) han revelado planes similares para acumular XRP, impulsadas por el optimismo tras la victoria parcial de Ripple contra la SEC y las promesas de Donald Trump de impulsar regulaciones cripto favorables en EE.UU. Sin embargo, los desafíos financieros de Trident, que reportó una pérdida neta de $3,1 millones en 2024 y una caída del 91,4% en sus ingresos, plantean dudas sobre la viabilidad de esta estrategia. Con XRP cotizando a $2,26 y un volumen de trading de $2.090 millones en las últimas 24 horas, ¿podrá Trident liderar una nueva ola de adopción corporativa de XRP o enfrentará un camino lleno de obstáculos?

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