El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha declarado que su administración establecerá nuevas tasas arancelarias para los socios comerciales del país en las próximas dos o tres semanas, según un comunicado emitido el 16 de mayo. En un giro estratégico, Trump señaló que, debido a la limitada capacidad para negociar acuerdos individuales con cada nación, el Tesoro y el Departamento de Comercio enviarán cartas a varios países detallando las tarifas que deberán pagar para acceder al mercado estadounidense. Esta decisión, liderada por el secretario del Tesoro, Scott Bessent, y el secretario de Comercio, Howard Lutnick, busca reequilibrar el comercio global en favor de EE.UU., pero podría desencadenar nuevas tensiones económicas con impacto directo en el mercado cripto.

La medida sigue a una pausa de 90 días en los aranceles “recíprocos” impuesta en abril, que incluyó un acuerdo con el Reino Unido y una reducción temporal de las tarifas con China, pasando de un 145% a un 30% hasta julio. Sin embargo, un arancel universal del 10% sobre bienes importados permanece vigente, generando preocupaciones sobre el aumento de precios y la interrupción de cadenas de suministro. Trump justificó la estrategia como una forma de proteger la industria local, afirmando que las cartas garantizarán un trato “justo” para los socios comerciales, aunque no ofreció detalles específicos sobre las tasas propuestas.

Para el sector cripto, esta política representa un doble desafío. Los aranceles podrían encarecer el hardware de minería, especialmente los equipos importados de Asia, afectando a empresas como American Bitcoin, respaldada por la familia Trump, que depende de proveedores como Bitmain. Además, la incertidumbre económica podría impulsar la demanda de criptomonedas como Bitcoin como refugio frente a la inflación, pero también generar volatilidad en activos más especulativos como las memecoins. Datos recientes muestran que Bitcoin cayó un 2% tras anuncios arancelarios previos, mientras que las stablecoins como USDT, ampliamente utilizadas en Tron, podrían beneficiarse de un aumento en las transacciones transfronterizas en mercados emergentes afectados por las tarifas.

La reacción de los socios comerciales ha sido mixta. Mientras el Reino Unido logró un acuerdo para reducir aranceles en sectores como el automotriz y el acero, otros países, como China y Canadá, enfrentan negociaciones más complejas. China ha solicitado una pausa arancelaria más larga, argumentando que los 90 días son insuficientes, mientras que Canadá continúa bajo un arancel del 25% sobre bienes no conformes con el T-MEC. La presión de los inversores para evitar una guerra comercial total sigue siendo alta, con empresas como Walmart advirtiendo sobre alzas de precios y estantes vacíos si las tarifas persisten.

A medida que el plazo de negociación se acerca, los mercados cripto y tradicionales se preparan para un período de incertidumbre. La capacidad de Trump para equilibrar su agenda proteccionista con acuerdos comerciales viables será crucial para evitar una escalada que podría frenar el crecimiento económico y afectar la adopción de activos digitales. CoinDaily seguirá informando sobre cómo estas políticas comerciales reconfiguran el panorama cripto, manteniendo a sus lectores al tanto de los riesgos y oportunidades emergentes.

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